(El Comercio, no lo quisieron publicar 2008)
Rafael Rey Rey
Publicado el cuarto artículo escrito por el Presidente Alan García sobre el tema, diversos “expertos” y “analistas” se han dedicado, únicamente a criticarlo. Una vez más. Enrique Bernales, César Lévano, Augusto Alvarez Rodrich, Sinecio López, Javier Diez Canseco, son algunos de ellos.
Todos me recordaron la definición de “expertos” que con ironía y precisión ha hecho Vittorio Messori: “personas cuyo trabajo principal consiste en explicar cada cierto tiempo –previo cobro de honorarios- por qué se equivocaron en todas sus predicciones”.
Qué fácil es criticar sin aportar soluciones!. Qué fácil es autotitularse “defensor de los pobres” cuando lo que parecen defender es “la pobreza”. Qué fácil es insultar como hacen algunos. Y es que “el insulto es el último recurso de aquel que no tiene argumentos”. Y a algunos “expertos” ya se les acabaron los argumentos o nunca los tuvieron.
El Presidente ha desarrollado 4 ideas. Con argumentos y con cifras objetivas. Sus críticos no han podido rebatirlos. Veamos.
- Que el perro del hortelano (p.h.) ha perdido la batalla contra la economía moderna.
- Que es falso que el gobierno no hace nada para combatir la pobreza.
- Que el p.h. no puede negar que hay programas contra la pobreza así que sólo le queda criticarlos.
- Que el p.h. no sale de su pobreza intelectual.
Las afirmaciones, los argumentos y las cifras que las sustentan son tan evidentes que lo que les molesta es que se les recuerde.
Todos, absolutamente todos, los países que han conseguido superar la pobreza lo han hecho por la vía de la economía moderna. Aquella que se basa en estabilidad monetaria y estabilidad jurídica para defender la propiedad. Condiciones necesarias para generar confianza y con ella inversiones privadas con las que se origina más empleo, más producción, más recaudación y por eso más recursos para seguir invirtiendo en obras sociales a favor de los más pobres.
En cambio todos los países, sin ninguna excepción, que siguiendo las recomendaciones de los comunistas, marxistas, “socialistas” o controlistas sólo han conseguido para sus pueblos la ruina económica y la miseria social.
Hoy mientras en Venezuela, Bolivia y Ecuador, la inflación, el desempleo, el desabastecimiento, la desconfianza, la fuga de capitales y el espanto de inversiones, se incrementan aceleradamente, el PBI del Perú crece a 9% anual, la inversión privada y pública bate todos los records, el empleo aumenta especialmente donde más se invierte (Ica, Trujillo, Lima, etc.), la industria se dispara con crecimientos del 17%, la construcción crece todavía mejor al 21%. Los programas sociales invierten más de S/.3,000 millones en el 2007 y serán S/.4,500 millones el 2008. Adicionalmente la inversión social en educación, salud, trabajo, justicia, pensiones sumó más de S/. 29,000 millones en 2007 y será de S/. 34,000 millones este año.
Además nunca antes se han puesto tantos recursos en manos de gobiernos regionales y locales: S/.13,600 millones para inversiones públicas.
Queda claro que el Gobierno sí lucha contra la pobreza. Tanto con la inversión pública con cifras nunca antes alcanzadas y además en forma descentralizada, como a través de la inversión privada que genera empleos estables, la mejor manera de reducir la pobreza.