(2009)
Rafael Rey Rey
Ministro de Defensa
Javier Diez Canseco, el marxista que todos conocemos, que predicaba (ahora no se atreve porque no le da votos) que la lucha de clases era el motor de la historia. El marxista que quiso cobrar “sus sueldos atrasados correspondientes” como senador y sin trabajar desde abril 1992 hasta julio 1995. El marxista que mientras no fue congresista despotricaba de los gastos operativos pero que los cobró puntualmente (desde 1995 hasta el 2006) cuando volvió al Congreso.
El marxista que ha cambiado de partidos, organizaciones, frentes y alianzas tantas veces que es difícil llevar la cuenta: Vanguardia Revolucionaria (VR), Vanguardia Revolucionaria- El Proletario (VR-ep), Unidad Democrática Popular (UDP), Izquierda Unida (IU), Partido Unificado Mariateguista (PUM), Partido Democrático Descentralista (PDD), Partido Socialista (PS) y que sin embargo tacha de tránsfugas a otros. El marxista a quien Serpa Cartolini (“hola Javier”) soltó “rápidamente” de la Embajada de Japón para que se convirtiera en el predicador de negociar con el MRTA.
El marxista que defendió la dictadura de Mao y la libanesa y defiende la dictadura de Castro en Cuba. Que NO creía en la democracia representativa (ver ideario UDP) pero que la usó para llegar al Congreso. El marxista que No hubiese permitido que los diarios confiscados por Velasco fueran devueltos a sus propietarios (ver ideario UDP) pero que se atreve a hablar de libertad de expresión. El marxista que planteaba reducir el gasto público en “áreas innecesarias” como la Policía Nacional o las FFAA “represivas” (ver ideario UDP) que ahora habla de la pobreza y atraso logístico actual de las FFAA y de los “miserables presupuestos que tienen”.
Ese marxista, que todos conocemos, acaba de escribir que Rafael Rey hace “apología del terror”, falso, hago lo contrario. Que he “acusado a la oposición de terrorista”, falso, nunca lo he hecho. Que he “calumniado a la CVR”, falso, he recordado lo equivocadas e injustas que son muchas de sus conclusiones. Que he “clamado por presencia militar norteamericana en el Perú”, falso, nunca lo he hecho. Que soy lobbysta de grandes pesqueras, falso, que le pregunte a la Federación de Pescadores del Perú (de la que él mismo fue asesor) a la Asociación de Pescadores Jubilados, al Sindicato de Pescadores de Chimbote, al Sindicato Único de Pescadores de Nuevas Embarcaciones Pesqueras, qué concepto tienen de mi gestión en el Ministerio de la Producción. Que deseo “arrasar el VRAE”, falso, he repetido innumerables veces en entrevistas y en el Congreso que la solución no es militar sino económica, política y social. Pero qué se puede esperar de un hombre cuya política ha sido, y es mentir, sistemáticamente.